Día del Asado: historia, tips y accesorios - Grill West

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🥩 El Día del Asado: más que una comida, un ritual argentino

En Argentina, el asado no se explica: se siente.
Es ese ritual que nos reúne alrededor del fuego, donde el tiempo se detiene y el humo cuenta historias.
Cada 11 de octubre celebramos el Día Nacional del Asado, un homenaje a una tradición que nos representa como país, como familia y como forma de vida.

 De las pampas al patio: el origen del Día del Asado

La idea de tener un día propio para el asado nació en 2013, cuando una comunidad en Facebook —@diadelasadoargentino— decidió rendirle tributo a lo que mejor sabemos hacer: compartir.

El 11 de octubre se propuso como la fecha para celebrar algo más grande que un plato. Es un día para honrar un rito social que une a los argentinos sin importar la edad, el lugar o la ideología.

Porque si hay algo que nos iguala, es el fuego prendido y el olor a carne asándose.

El asado argentino: símbolo, arte y unión

Más que una comida

El asado es tiempo compartido, risas, historias y paciencia. No se apura: se disfruta. Es la pausa que nos reconecta con lo esencial.

Un símbolo de unión

Familia, amigos, vecinos: todos alrededor de la misma parrilla. El asado es ese idioma común que entendemos en cualquier mesa.

El arte del parrillero

No hay fórmulas exactas, pero sí pasión y experiencia: controlar brasas, timing y punto justo. Es un arte que se aprende mirando, haciendo y compartiendo.

El secreto Grill West para un asado “mantequita”

En Grill West lo sabemos bien: el mejor asado no empieza en la parrilla, sino en la preparación. El corte, el fuego y la espera hacen la diferencia.

• Elegí cortes con buena infiltración: asado banderita, vacío o tira de costilla.
• Brasas firmes, sin llamaradas directas; calor parejo y paciente.
• No pinches la carne: conservá los jugos. Usá pinza, no tenedor.
• Sal gruesa al final, cuando el corte está dorado y a punto.

Consejo extra: dejá reposar la carne unos minutos antes de cortarla para que los jugos se redistribuyan. Resultado: suave, tierna… mantequita.

Complemento: las herramientas que ayudan a hacer el asado 

Ahora que tenés claro el fuego y el punto, sumá las herramientas de siempre para que la carne quede suave y jugosa. Pinza parrillera larga para mover sin pinchar y conservar los jugos;  Brasero de encendido para obtener brasas parejas sin líquidos; atizador y pala para acomodar el lecho y mantener calor constante. Un termómetro de carne te saca la duda en cortes gruesos: mejor medir que adivinar. Y no te olvides de los guantes térmicos para trabajar cómodo y seguro. Entre tanda y tanda, cepillo limpia parrilla para retirar residuos y que el próximo bocado tenga solo sabor a asado. Al servir, tabla de madera y cuchillo bien afilado con su chaira: corte prolijo, sin desgarrar fibras. Son detalles simples, de los de antes, pero marcan la diferencia entre un asado rico… y uno “mantequita” de verdad.

Mirá cómo lo hacemos nosotros

Si querés inspirarte para tu próximo domingo, mirá nuestros videos de Grill West y descubrí tips, recetas y el toque que transforma la parrilla en arte.

Y si estás preparando tu próxima juntada, encontrá los mejores cortes, cortando entraña y Bondiola en el kamado en nuestro canal de Youtube.

Un fuego que nos une

Este 11 de octubre, celebrá el Día del Asado como se merece: con tiempo, amigos y buena carne. Porque más allá del humo, del sabor y del ritual, el asado es eso que nos une y nos representa.

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